En una foto, una polilla de invierno (Geometridae) visible, forma un halo fantasma con un ala. Vuelan en el frío bosque de otoño. Intenté fotografiarla para ver la dinámica de su vuelo. Para ello, elegí una velocidad de obturación larga, puse el flash a la segunda cortinilla y lo iluminé con una lámpara led. A veces conseguía una foto nítida. Afortunadamente, en una de las fotos se ve una forma junto a la mariposa.
Los vilanos de la imagen son semillas vegetales delicadas (Asteraceae), sensibles y muy ligeras. La composición de la fotografía ha resultado sumamente complicada dado el gran número de vilanos utilizados, su tamaño y ligereza, más si tenemos en cuenta que uno de los objetivos que buscaba era que fueran visibles todos ellos.
Glacial Enigma desvela el alma de Cuejdel, el gran lago natural embalsado de Rumanía. El abrazo del invierno, visto desde arriba, es mi búsqueda poética. En medio del ballet helado reflejado sobre el lienzo del lago, se despliega la sinfonía silenciosa de la naturaleza. Aquí, donde el hielo y el cielo convergen, la imaginación no tiene límites.
El lago Magadi ofrece motivos surrealistas como telón de fondo para fotografiar flamencos enanos (Phoeniconaias minor) sobrevolando el lago. Un fondo oscuro salpicado de motivos celestes lo convirtió en un marco ideal para hacer un monocromo. Tomé esta foto desde un helicóptero ultraligero.
La azucena silvestre o campanilla grande (Narcissus pseudonarcissus) -llamados lirones en la montaña Palentina-, son flores tempranas que brotan al final del invierno. Es una rareza ver estas flores cubriendo encinares, pero en zonas secretas de los bosques de Brañosera se hace el milagro. Es una sola foto, tomada con un filtro ND10 para conseguir 13 segundos de exposición: 8 s para exponer el suelo lleno de flores y el resto del tiempo de exposición en los árboles que tenía detrás, inclinando el trípode.
Insectos recolectados en una lámpara durante el verano. Se produjo una abertura de manera accidental en una lámpara de mi casa y, después del verano, me encontré una rica colección de insectos. Esto es un recordatorio de la desaparición, de pequeñas e importantes criaturas que nos rodean y que no vemos. Dispuse los insectos en mi mesa de luz con luz también desde arriba.
En la rasa mareal de la playa de Algorri, en pleno Geoparque de la Costa Vasca, aparecen estas criaturas mecidas por el agua. Sus colores, texturas y formas nos llevan a pensar en criaturas de otros mundos (Anthozoa).